Facebook endureció sus políticas de moderación de contenidos el viernes, al prohibir más tipos de mensajes de odio en los anuncios publicitarios y comenzar a colocar advertencias a las publicaciones problemáticas que decida no eliminar.
Mark Zuckerberg, el presidente de la red social, defiende desde hace meses en nombre de la libertad de expresión un enfoque más flexible que Twitter o YouTube, sobre todo en lo que se refiere al discurso de figuras políticas.
Pero él mismo dio detalles sobre el endurecimiento de su posición.
La plataforma ahora suprimirá los anuncios que afirmen que las personas de determinados orígenes, etnias, nacionalidades, género u orientación sexual representan una amenaza para la seguridad o la salud de los demás, dijo Zuckerberg, en una transmisión desde su perfil de Facebook.
La mayor red social mundial lleva varias semanas sometida a una fuerte presión por parte de la sociedad civil, así como de algunos de sus empleados, usuarios y clientes para ser más intransigente con los contenidos de odio.
Organizaciones como la Liga Antidifamación (ADL) y la asociación de defensa de los derechos de los afroestadounidenses NAACP, pidieron a los anunciantes boicotear a Facebook durante julio para presionarla a que regule mejor a los grupos que la utilizan para incitar al odio, el racismo o la violencia.
Al llamado respondieron afirmativamente el gigante de alimentos y cosméticos Unilever, la compañía estadounidense de telecomunicaciones Verizon, el fabricante de helados Ben & Jerry's (Unilever), los fabricantes de artículos de ocio al aire libre Patagonia, North Face y REI, así como la agencia de empleos Upwork.
El viernes por la noche Coca-Cola, que invierte enormes cantidades de dinero en anuncios, comunicó que suspendería al menos 30 días su publicidad en redes sociales, como parte de la campaña contra el racismo en esas plataformas.
"No hay lugar para el racismo en el mundo y no hay lugar para el racismo en las redes sociales", dijo James Quincey, director ejecutivo del gigante mundial, en un breve comunicado.
El comediante y humorista Sacha Baron Cohen, un crítico de la red, pidió el viernes a las compañías "que gastan más dólares en anuncios de Facebook" que se unan al movimiento. Citó a Procter & Gamble, Walmart, Microsoft, Amazon, el New York Times y otros.
Advertencias
La segunda decisión tomada por el jefe de Facebook está relacionada con el incidente que encendió el debate a finales de mayo.
Zuckerberg habló el viernes sobre cómo se prepara la plataforma frente a las elecciones presidenciales de noviembre y aseguró que las medidas tomadas son resultado "directamente de las sugerencias de una organización que defiende los derechos".
"Las elecciones de 2020 ya se anunciaban caldeadas, y eso antes de enfrentar las complejidades adicionales relacionadas con la pandemia y las protestas por la justicia racial en todo el país", dijo.
Prometió que sus equipos están movilizados para contrarrestar cualquier intento de maniobra para disuadir a las personas de ir a votar (en particular a las minorías).
Y volvió, aunque sin mencionarlo explícitamente, al incidente que provocó protestas contra su red.
A diferencia de Twitter, Facebook se negó a moderar mensajes polémicos del presidente Donald Trump a fines de mayo, uno sobre el voto por correo (que trató como fraude electoral) y otro sobre las manifestaciones y disturbios que siguieron a la muerte de George Floyd, un afroestadounidense asfixiado por un policía blanco en Minneapolis.
Twitter decidió ocultar los comentarios del presidente y reducir su circulación potencial, aunque dejándolos disponibles para consulta.
Facebook toma así una postura a medio camino entre eliminar contenidos o no intervenir en absoluto, lo que era su política hasta ahora.
"Los usuarios podrán compartir este contenido para condenarlo (...) pero agregaremos una advertencia para decirle a las personas que el contenido que comparten puede violar nuestras reglas", dijo Zuckerberg.